sábado, 21 de febrero de 2015

JULIO II...PAPA,MECENAS,SOLDADO Y SOBERANO DE LA CRISTIANDAD




                     Julio II un soberano de la cristiandad

Giuliano della Rovere, el papa mecenas, soldado y auténtico soberano de la cristiandad, está vinculado a la Universidad de Sevilla por cuanto fue el que autorizó la creación de la misma, por bulas de 1505, confirmada y extendida por otra de 1508. Acerquémonos a este singular hijo de la Iglesia.
retrato del Papa
El Papa Julio II caracterizado como Gregorio IX, pintado por Rafael (h.1511) en la Estancia de la Signatura (Palacios Vaticanos)
Juliano tenía una amplia experiencia antes de ser nombrado pontífice en 1503, sucediendo a Pío III. Miembro de la orden de los franciscanos, su tío el papa Sixto IV le había nombrado obispo de Carpentras y, posteriormente cardenal-obispo de Lausana (1471), arzobispo de Aviñón (1474), legado en Francia (1480-84) y cardenal de Ostia. Inocencio VIII le otorgó importantes puestos en la corte romana e incluso había pugnado por la elección con Alejandro VI.
Tomó el nombre de Julio como para indicar una obra de restauración semejante a la que Julio César había realizado. El nuevo Papa tenía un carácter violento e impulsivo (era llamado el Terrible), más propio de un rey o condotiero que no de un jefe de la Iglesia. Fue un gigante de aquellos que Miguel Ángel retrató con el cincel y los colores. Sumamente activo, las cuestiones políticas tuvieron para él preferencia sobre las religiosas.
A la muerte de Pío III alcanzó el solio papal, marcándose como objetivo devolver la independencia al papado, recuperando por tanto su esplendor y poder. Sus primeros pasos se dirigieron a la realización de una importante reforma monetaria que le permitiera iniciar su política expansiva. Mandó acuñar una moneda de plata que fue denominada «julio». Hizo florecer el comercio y fué un hábil administrador de las finanzas de las que hizo uso para grandes empresas políticas y artísticas.
Supo consolidar de manera bastante definitiva el poder temporal de la Santa Sede al controlar a los señores feudales que de continuo desobedecían la autoridad soberana del Pontífice y expulsó de su ámbito de poder al peligroso César Borgia, al que hizo encarcelar. No dudó en tomar la espada y someter a la ciudad de Bolonia, dotándola de una nueva Constitución, así como la de Venecia. Para atacar a ésta última, que se había apoderado de Rávena, se alió provisionalmente con los "bárbaros" franceses en la liga de Cambrai (dic. 1508). Después de excomulgar a la república veneciana, intervino personalmente en las operaciones y obligó a Perugia y Bolonia a entrar en su alianza.
Posteriormente, temeroso del creciente poderío francés, el pontífice concertó de manera separada una paz con Venecia y decidió atacar a sus antiguos aliados, los franceses, provocando la reacción de éstos, que tomaron Bolonia. La estrategia de Luis XII fue crear un cisma en el terreno religioso al convocar en Pisa un concilio, en el año 1511 que depuso al Papa. De esta manera el monarca francés pretendía minar la autoridad papal y contrarrestar la política exterior de la Santa Sede, que estaba resultando bastante perjudicial para la corona gala. Juliano retomó las riendas de la situación, excomulgó a los cardenales que acudieron a Pisa y convocó un Concilio General en Letrán (1512) para condenar las doctrinas conciliaristas vigentes desde los concilios de Constanza y Basilea, poniendo fin al presunto cisma. 



Guardia Suiza
Su principal objetivo fue hacer de la Santa Sede la principal potencia italiana y liberar a la península de la ocupación de los "bárbaros" (extranjeros). En el último año de su existencia, Julio II gozó de un amplio reconocimiento en Italia al aparecer como abanderado de la lucha contra los extranjeros, ya que tras las primeras victorias, los franceses tuvieron que retirarse de la península y el Papado recuperó sus antiguos territorios. La independencia pontificia estaba asegurada.
Para su seguridad personal, estableció eL 21 de febrero de 1506, la Guardia Suiza, disciplinada y mandada por capitanes elegidos por él. Por esta razón la bandera de la escolta pontificia lleva desde entonces en el cuartel inferior las armas de Julio II y en el superior las del Papa reinante. 



Julio II, protector de artistas

 La figura de Julio II está asociada a Miguel Angel ya que fue este pontífice el que le encomendó la decoración de la bóveda de la Capilla Sixtina  al polifacético artista.De la cual solo expondre unos detalles,pues precisaria una publicacion exclusiva y muy extensa para mostrar tanta belleza....












Comenzará en 1508 y la terminaría en 1512; poco tiempo pudo gozar el papa de la obra que estimuló a fuerza de gritos, arrebatos de ira, golpes -llegó a golpear con un bastón al artista- y dilaciones en los pagos, pues moría cuatro meses más tarde. Los continuos enfrentamientos entre dos almas casi gemelas han pasado a la posteridad, siendo uno de los suplicios de Buonarrotti la construcción del sepulcro para el papa, que se proyectó en 1505 como el mausoleo más grandioso de la cristiandad para la Basílica de San Pedro.



 Pero no llegó a terminarlo pues fue apartado, según la leyenda, por envidia de Bramante, el arquitecto de San Pedro, aunque el Papa alegó problemas de financiación. Luegó lo retomó pero las cuarenta figuras previstas en marmol de Carrara se quedaron en siete, de las que Miguel Angel solo hizo tres, y de San Pedro terminó en la iglesia de Pedro In Vincoli. Estas relaciones de amor-odio se reflejan en una película de Carol Reed (1965), protagonizada por Charlton Heston: "El tormento y el éxtasis"
retrato del Papa
Julio II pintado por Miguel Angel
La labor de mecenazgo de Julio II no se limita a Miguel Angel ya que ayudó a otros artistas como Bramante o Rafael a que encargó en 1508 que decorara sus aposentos en el Vaticano, los que hoy se conocen como Estancias del Vaticano. Allí pintaría el maestro de Urbino uno de los conjuntos de frescos más famosos de la historia de la pintura. De las cuatro estancias sólo concluyó la decoración de la Estancia de la Signatura, donde pintó las figuras de la Teología, la Filosofía, la Poesía y la Justicia en los cuatro medallones de la bóveda, y la Estancia de Heliodoro. Tras la muerte de su mecenas, y debido a las numerosos encargos del artista, sólo consiguió pintar parte de la tercera estancia, la del Incendio del Borgo. Para la cuarta, la Sala Constantina sólo realizó sus diseños.
Fue Julio II el impulsor de la construcción de la Basílica de San Pedro, sobre la tumba del primer papa, encargándosela a Bramante; fue este Papa quien puso la primera piedra el 18 abril de 1506; tan sólo pudo ver alzados sobre las columnas los arcos en los que tenía que erigirse la cúpula. Como buen amante del arte, fue el promotor de la creación del Museo Vaticano.
Era hombre de mucho ingenio, de refinado gusto, óptimo conocedor de artistas y obras de arte. Hizo construir, mientras era cardenal, magníficas fortalezas en Grottaferrata, Ostia y Chiaravalle.
retrato Julio II
El anciano papa Julio II pintado por Rafael
National Gallery (Londres)
Elegido Papa, protegió los estudios y a la universidad romana; fundó en Faenza la primera imprenta árabe. Fue amigo de los mejores literatos, como el Sadoleto y el Bembo. Inspiró a Miguel Ángel la representación en la bóveda de la Sixtina (otoño de 1508-31 oct. 1512) del poema del mundo antiguo hasta la llegada de Cristo; Rafael, que reprodujo en más de una ocasión las facciones del pontífice, representó por deseo del Papa, en las Salas vaticanas, el concepto del Medievo cristiano y la armonía entre la ciencia y fe, solemnizando la fe de Julio en diferentes episodios.
En cuanto a la Universidad de Sevilla, es fundamental su intervención al conceder en 1505 una bula a Maese Rodrigo Fernández de Santaella, arcediano de la catedral de Sevilla, por la que autorizaba erigir en la ciudad un Colegio y Universidad. En la Bula, entre otras disposiciones, se permitía la enseñanza de Artes, Lógica, Filosofía, Teología y Derecho Canónico y Civil. Otra Bula del mismo día confirmaba las prerrogativas y beneficios otorgados al Colegio Santa María de Jesús. Una nueva bula de Julio II, dada el 16 de junio de 1508, amplió los privilegios contenidos en la primera.



                                               Aposento del Papa Julio II  Rafael



                                                  Estancia de Papa Julio II Rafael


                                                            Basilica de San Pedro exterior




                                               Basilica de San Pedro vista interor


En el palacio del Vaticano comenzaban a surgir bajo su pontificado, sobre el plano de Bramante, los patios de S. Dámaso y del Belvedere. En este último comenzó a reunir una serie de espléndidas esculturas antiguas que constituirían el primer núcleo del Museo Vaticano, como la de Apolo y la de Laocoonte. La iglesia de Santa María del Popolo, tan querida de la familia de la Róvere, se embellecía con los frescos del Pinturicchio y las esculturas de Andrea Sansovino. Para financiar San Pedro publicó una Indulgencia en 1506, cosa no muy acertada por los tiempos que corrian; poco después este tema se volvería contra la Iglesia por la reforma luterana.

                           Colegiata de Santa Maria Maggiori-Capela Baglioni  Pinturicchio

Nacía una nueva Roma con sus calles rectilíneas, flanqueadas de bellos palacios, como vía Julia. Por otra parte, se realizaron obras en Loreto con el pórtico de la basílica, el palacio Apostólico, el revestimiento marmóreo de la Santa Casa.

Muerte y juicio sobre su personalidad.

Murió con edificante piedad, en la noche del 20 al 21 feb. de 1513, rodeado de los cardenales, a los que pidió perdón por sus defectos, rogándoles la elección de un digno sucesor.
Recibió sepultura en San Pietro in Visconti donde está su mausoleo, pequeña parte de la colosal obra encargada por el pontífice y concebida por Miguel Ángel. Sobre la tumba se halla la figura simbólica del Moisés


                                               Sepultura de Julio II-Miguel Angel



                                                                        Prati Visconti


 Pero el monumento más importante del pontífice es la basílica de San Pedro y su gigantesca cúpula, proyectada por Miguel Angel y terminada por discipulos suyos. Ninguno de ellos llegó a verlos terminados Juliano.
Cúpula de San PedroLos juicios sobre Julio II varían según la tendencia de los escritores. Pastor lo ensalza por haber asumido con energía la misión de «salvar el papado». Importante es el juicio de Guicciardini «Papa digno de la gloria más brillante... si la diligencia y empeño por él empleados en exaltar la Iglesia en el orden temporal y mediante el arte de la guerra hubiesen sido usados para engrandecerla en el orden espiritual con el arte de la paz; sin embargo, él fue, más que todos sus predecesores, digno de imperecedera memoria y eterna gratitud».
El carnaval de enero de 1513 fue para él una verdadera y auténtica apoteosis: un desfile triunfal exaltaba los éxitos políticos del Papa; Julio II era representado como emperador con cetro y globo, rodeado por Horacios, Camilo, Escipión y otros héroes de la Antigüedad.
 http://personal.us.es/alporu/historia/julio2papa.htm

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