viernes, 12 de julio de 2019

CULTURA VINCA



Hembra antropomórfica con pequeños pechos y caderas prominentes, ojos de ave,con forma de almendra, que son características típicas de la cultura Vinča. También lleva adornos que representan ropa -desde el cuello y falda larga decorada con líneas incisas.
Terracota, período neolítico, cultura Vinča, alrededor de 5000-4500 A.C., excavado a la profundidad de 2.5 metros en Vinča,cerca de Belgrado, capital de Serbia.


La cultura de Vinča (Vincha) fue la cultura más temprana de Europa (entre el VI y III milenio a. C.), y se encontraba a lo largo del Danubio en Serbia, Rumanía, Bulgaria y Macedonia, aunque huellas de esta cultura se pueden encontrar en los Balcanes, varias zonas de Europa Central y Asia Menor.
Los poblados continúan la tradición de Starcevo, lo que vincula este grupo a la llamada Cultura Tell.

Obtuvo su nombre del pueblo de Vinča, ubicado en las orillas de Danubio, a 14 km de Belgrado, donde yace uno de los más importantes asentamientos neolíticos de Europa Oriental, descubierto en 1908 por el equipo arqueológico de Miloje M. Vasić, el primer arqueólogo de Serbia, que desenterró una gran colección de objetos de arte prehistórico. La datación por radiocarbono determinó la fecha de aparición de esta cultura antes de 4000 a. C.
En el VI milenio a. C., esta cultura cubría el área de los Balcanes centrales, limitando con los Montes Cárpatos en el norte, con Bosnia en el oeste, la llanura de Sofía en este y el valle de Skopje en el sur.



Hay agrupaciones de casas de barro y madera rectangulares con varias habitaciones, una de las cuales, la central, suele contar con un horno para el pan.
El punto de partida de Vinča, o fase A, puede considerarse Neolítico, una variante de la cultura de Starcevo-Körös.
Las etapas B y C son calcolíticas (Edad del Cobre), la D corresponde al horizonte de Vinča-Plocnik, que toma ese nombre de un escondrijo de objetos metálicos y coincide con la Edad del Bronce.
Los elementos más característicos de esta cultura son las cerámicas oscuras, con decoración acanalada en relieve, así como sus idolillos de barro y piedra con rostros de cabeza de ave.
Durante la fase Vinča-Plocnik se explotó la mina de Rudna Glâva; cuenta con varios pozos verticales y otros secundarios que se ramifican lateralmente siguiendo las vetas de malaquita. Los testimonios arqueológicos, como las herramientas de asta y más de un centenar de martillos sobre guijarros con estrangulamiento central para el enmangue, se mantienen tal como fueron abandonados por los mineros calcolíticos, lo que permite conocer como se realizó la explotación del mineral.
La roca que contenía los minerales se calentaba mediante hogueras para ser después regada sobre la marcha con agua almacenada en tinajas, lo que provocaba la aparición de grietas. A continuación, se clavaban en estas grietas ciertos picos de asta de ciervo con los que se desgajaban los bloques, que eran trasladados a la superficie. Una vez allí, mediante martillos de minero se desgajaba la parte sin valor del mineral, desmenuzándose este último mediante morteros.

La escritura Vinča, también llamada alfabeto Vinča o Escritura europea antigua, es el nombre dado a un tipo de marcas encontradas en una serie de prehistóricos artefactos hallados en el sureste de Europa. Algunos consideran las marcas como un sistema de escritura, atribuible a la Cultura Vinča, que habitó la región hacia 6000-4000 a. C.
En 1875, las excavaciones arqueológicas de Zsófia Torma (1840–1899) en Turdaş (Tordos), en Transilvania (actual Rumanía), descubrieron un grupo de objetos con inscripciones de símbolos desconocidos. Objetos similares se encontraron durante las excavaciones de 1908 en Vinča, un suburbio de la ciudad serbia de Belgrado, a 120 km de Tordos. Más tarde, aparecieron objetos en Banjica, también en Belgrado. La cultura ha sido llamada cultura Vincha-Tordos, y las inscripciones, escritura Vincha-Tordos.
El descubrimiento de las tablas Tartaria en Rumanía por Nicolae Vlassa en 1961 impulsó el debate. Vlassa consideró las inscripciones como pictogramas, y la datación por carbono de los objetos hacia el 4000 a. C. lo convertía en el primer sistema de escritura.


Son tres tablillas descubiertas en Tărtăria, Rumanía. Muestran una serie de símbolos grabados que han sido objeto de considerable controversia entre los arqueólogos, en tanto que según algunas opiniones podrían ser una de las primeras formas de escritura del mundo.
Las tablillas fueron encontradas en 1961 a 30 km aproximadamente de la localidad de Alba Iulia, Transilvania. Rumanía. Nicolae Vlassa, un arqueólogo del Museo de Cluj, desenterró tres tablillas con 26 símbolos, junto con un brazalete y varios restos de huesos humanos. Dos de las tablas son rectangulares y la tercera es circular.
En las tres, sólo presenta símbolos una de las caras. Símbolos similares se han hallado en utensilios localizados en las excavaciones de Vinča en Serbia y otros lugares del sur de los Balcanes, por lo que podrían estar relacionados.
Como dato, han aparecido muchos más fragmentos con inscripciones similares en varias excavaciones arqueológicas, principalmente en Grecia, Bulgaria, República de Macedonia, Rumanía, este de Hungría, Moldova, sur de Ucrania y otros lugares de la antigua Yugoslavia.


 En 1961, el arqueólogo Nicolae Vlassa descubrió lo que podría ser una prueba directa de las primeras formas de escritura en el mundo. Durante la realización de una excavación arqueológica en un yacimiento neolítico en Rumania, el equipo de Vlassa descubrió tres pequeñas tablillas de arcilla que contienen grabados indescifrables, ahora conocidos como las tabletas de Tartaria. Ha habido diferencias de interpretación sobre el significado de los grabados en las tabletas. Algunos creen que los grabados son una forma primitiva de escritura, mientras que otros creen que son pictogramas, garabatos al azar, símbolos religiosos, o símbolos de propiedad. Las tabletas son cada uno de aproximadamente 2 ½ pulgadas de ancho. Dos son rectangulares, y una es redonda. La tableta redonda y una tableta rectangular tienen orificios perforados a través de ellos. Las tablillas de arcilla sin hornear eran, y fueron descubiertos junto con 26 estatuillas de arcilla, piedra, una pulsera de concha y huesos humanos dañados. Algunos creen que las tabletas se encuentran realmente dentro de una fosa de sacrificio. Las tabletas están inscritos en un solo lado, y las inscripciones se asemejan a un animal con cuernos, una figura poco clara, un motivo vegetal, una rama o un árbol, y una variedad de símbolos abstractos principalmente.

Hay incertidumbre en cuanto a la datación de las tabletas. La unidad de conservación en el Museo de Cluj en Rumanía al horno las tabletas para su conservación, y para hacer que el carbono 14 data posible. Inicialmente, se pensaba que las tabletas que se originó como parte de la cultura Vinca-Turdas, que data de 2700 aC. A través de la datación por carbono, sin embargo, se demostró que los comprimidos de tener posiblemente originado ya en 5500 antes de Cristo durante el tiempo de la fase de Eridu temprana de la civilización sumeria en Mesopotamia. Debido a la evidencia estratigráfica contradictoria, se disputan las estimaciones basadas en la datación por carbono. Hay mucho debate académico en cuanto al significado de las inscripciones en las tabletas. Algunos estudiosos han llegado a la conclusión de que las inscripciones son una forma temprana de la escritura. Basan esta conclusión en cuatro supuestos. En primer lugar, las inscripciones parecen ser secuenciado en filas. En segundo lugar, cada personaje parece tener un significado inequívoco. En tercer lugar, hay formas estándar que fueron utilizados por los escribas de otros artefactos de la civilización del Danubio. Y en cuarto lugar, los símbolos crean una forma rectilínea que es comparable a otros sistemas de escritura arcaicas. Si bien estos supuestos llevan a la conclusión de que las inscripciones eran una forma temprana de la escritura, no se sabe qué tipo de escritura que representan.


 Otros estudiosos consideran las inscripciones a ser un conjunto de pictogramas y garabatos al azar. Debido a la especulación de que las tabletas se encuentran en un sitio de entierro de sacrificios, muchos creen que los símbolos eran de un contexto religioso. Algunos estudiosos creen que los huesos humanos encontrados con las tabletas eran las de un sacerdote, un chamán, un espíritu-medio, o un alto dignatario. Huyendo de la descripción de Vlassa de un sacrificio ritual, algunos estudiosos creen que esta persona murió en un incendio, y luego fue enterrado con las tabletas, ya que eran de importancia para él, mientras que él había vivido. Otros todavía creen que los huesos eran los de un "sumo sacerdote", quien fue quemado vivo en la finalización de su tiempo de servicio, de acuerdo con la tradición sumeria, en honor del gran Dios Saue. Incluso se ha sugerido que las dos tablas con agujeros perforados en ellos pueden haber sido usados ​​de forma simultánea, en un patrón de superposición, durante algún tipo de ceremonia de iniciación. Gran parte del debate sobre la datación de las tabletas se debe a inconsistencias que envuelve el descubrimiento y posterior cocción de las tabletas. Curiosamente, Vlassa no estaba realmente presente cuando se descubrieron las tabletas. La razón de su ausencia en el momento nunca fue explicado. Las tabletas fueron encontrados en una fosa que contenía una alta humedad, y estaban cubiertos de piedra caliza. Por esta razón, las tabletas eran suaves en el descubrimiento. Antes se tomaron fotos, las tabletas se cocieron con buenas intenciones, pero la intención excesivamente apresurada para preservarlos. Quizás un análisis más profundo antes de la cocción habría proporcionado respuestas a algunas de las preguntas que permanecen hasta nuestros días. Se ha argumentado que en lugar de hacer la datación por carbono posible, la cocción ha hecho imposible que las tabletas para siempre lo hacen a través de pruebas de carbono. En general, el análisis de las Tablas de Tartaria ha dado lugar a muchas hipótesis interesantes sobre la cultura humana temprana, y el surgimiento de la comunicación por escrito. Mientras artefactos antiguos pueden aparecer inicialmente para responder a muchas preguntas acerca de la civilización humana, en este caso, está claro que algunos hallazgos en última instancia, nos llevan a más preguntas que respuestas.


Realmente ¿Comenzó en Sumer la historia del hombre u otras sociedades más avanzadas precedieron a esta civilización mesopotámica? La enigmática cultura Vinca, nacida junto al Danubio, pudo estar tanto o más "civilizada" que la sumeria. Evidencias arqueológicas apuntarían en este sentido y, de hecho, no hay más que echar un vistazo a las representaciones de sus divinidades para reconocer que, ciertamente, guardan un llamativo parecido con esos "extraterrestres" «grises» popularizados a través del fenómeno OVNI.
Junto al azul Danubio también hay cicatrices ancestrales del pasado: allí se desarrolló la primer cultura prehistórica europea hace por lo menos 7.000 años, a juzgar por las minas de cobre que, a 140 kilómetros de Belgrado, en Rudna Glava, confirman esa antigüedad.

Catorce kilómetros al sureste de Belgrado, en un promontorio de diez metros de altura ubicado en la ciudad de Vinca, el arqueólogo serbio Mioje Vasic descubrió en 1908 el asentamiento de una cultura cuyo nombre se deconoce ( heredó el nombre de la ciudad donde tuvo lugar el hallazgo ) cuya metrópolis era el centro de una civilización que se extendía a través de Bosnia, Macedonia, Rumania, Bulgaria y Serbia, aunque también pueden encontrarse sus huellas en otros lugares de Europa Central e incluso en Asia Menor. 


Manejaban y comerciaban valiosos minerales como la obsidiana y el cinabrio y muchos de sus utensillos se asemejan a los que utiliza nuestra civilización actual alcanzando un elevado grado de producción artística con pinturas de colores vivos tanto en las pinturas como en los tejidos, los adornos corporales y las estatuas. 
Sus casas tenían vigas y pisos de madera, paredes de paja y barro y techos de chapa, constando de varias habitaciones con ausencia de patios, estando amuebladas con sillas, mesas y camas. 
En vasijas halladas en el énclave pueden verse dibujadas embarcaciones a vela, lo cual evidencia que conocían la ciencia de la navegación. 




Uno de los hechos más notorios de esta cultura es que jamás pelearon una guerra ni contra ellos mismos ni contra terceros, récord que no puede igualar ninguna cultura conocida hasta el momento ( incluso los indios hopi, cuyo nombre significa “los pacíficos”, protagonizaron una sangrienta batalla contra los españoles en la época de la colonización ). 

Y ése es sólo el comienzo de los enigmas de la cultura Vinca: la desaparición de su metrópolis principal es notoriamente misteriosa, dado que los arqueólogos han encontrado restos de un gran incendio, pero lo extraño es que luego de éste los ciudadanos desaparecieron por completo, en lugar de permanecer en la zona para reconstruír la ciudad como indicaría la lógica.

Tampoco se han encontrado señales de una emigración, lo cual nos lleva a las inevitables preguntas: ¿ qué fue lo que causó el gigantesco incendio ? ¿Fue éste parte de una megacatástrofe mucho mayor que llegó a acabar con la vida de todos los habitantes de Vica?¿una liberación de fuerzas energéticas con poderes similares o superiores a los de las bombas atómicas tal vez?. 

https://es.wikipedia.org/wiki/Cultura_de_Vin%C4%8Da#:~:text=La%20cultura%20de%20Vin%C4%8Da%20(Vincha,Europa%20Central%20y%20Asia%20Menor.
http://nadanoslibradeescorpio.blogspot.com/2012/03/piramides-de-bosnia-arqueologia.html
https://www.carlosmesa.com/la-cultura-vinca/


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